Aldo Elías anticipa una temporada con mayor ocupación hotelera de la prevista
Expectativas positivas para la temporada: ocupación hotelera y cambios en la demanda
El vicepresidente de la Asociación de Hoteleros y Turismo de la República Argentina, Aldo Elías, evaluó los últimos datos de ocupación hotelera del INDEC y señaló que la actividad turística viene registrando un repunte sostenido desde la segunda quincena de julio. Para la temporada estival anticipó “bastante mayor ocupación de la proyectada”, con especial énfasis en la Costa Atlántica.
Cómo se sostiene la mejora
Según Elías, la recuperación comenzó antes de lo previsto y se consolidó durante el segundo semestre: «agosto tuvo una mejora respecto de lo que teníamos proyectado, septiembre exactamente lo mismo, y octubre y noviembre ya se notó un cambio fuerte», explicó en su intervención en Canal E. El dirigente atribuye la mejora a la mayor movilidad de los turistas dentro del país y al desempeño simultáneo de varios destinos.
Destinos que impulsan la actividad
En octubre, la ciudad de Buenos Aires mostró un buen nivel de ocupación, pero Elías remarcó que no fue el único motor: «se trabajó muy bien en el litoral y hemos tenido buen movimiento turístico en lo que tiene que ver con Córdoba y con algunos destinos del sur de la Argentina». Para fin de año, afirmó, la Costa Atlántica está «trabajando muy bien» y estimó que enero podría incluso superar el de la temporada anterior.
Modificaciones en la demanda: estadías más cortas
El comportamiento del turista argentino cambió en los últimos años: las estadías largas se redujeron y las escapadas cortas se multiplicaron. «Las vacaciones largas no existen más, la gente se toma máximo una semana o aprovecha dos fines de semana juntos», detalló Elías. En su evaluación, hoy una duración razonable de viaje oscila entre cuatro y nueve días, lo que genera una circulación más pareja a lo largo del año y atenúa la estacionalidad clásica.
Tarifas dinámicas y estrategia del sector
Elías destacó la lógica comercial que rige en la hotelería: la noche que no se vende no se recupera, por eso las tarifas se ajustan en función de la demanda. «A mayor demanda los precios se calientan y cuando no hay ocupación los precios están siempre para abajo», resumió. Ese esquema obliga al sector a trabajar con precios dinámicos y promociones puntuales para maximizar la ocupación.
Contexto estadístico
El INDEC, Instituto Nacional de Estadística y Censos, difunde periódicamente indicadores de ocupación hotelera que sirven como referencia para medir la recuperación del turismo interno. Aunque Elías no aportó cifras propias en su declaración, vinculó la mejora observada en los registros oficiales con la actividad real que perciben los prestadores y operadores en los distintos destinos.
Perspectivas y riesgos
La expectativa de una temporada mejor a la proyectada se apoya en la demanda interna y en la diversificación de destinos. Sin embargo, factores como la evolución de la situación económica, los costos operativos del sector y la disponibilidad de combustible o transporte pueden condicionar los resultados. Elías planteó optimismo, pero sus apreciaciones apuntan a una recuperación que todavía hay que consolidar con políticas que faciliten la circulación y fortalezcan la oferta turística.
Fuentes y lectura complementaria: