Alianza entre Córdoba, La Pampa y San Luis para proteger al caldén

Un convenio interprovincial para preservar el Caldén
La alianza entre Córdoba, La Pampa y San Luis busca preservar al caldén (Neltuma caldenia), un árbol endémico que cumple funciones clave como la regulación hidrológica, el almacenamiento de carbono y la provisión de hábitat para la fauna. El acuerdo se firmó en la Estancia Ralicó y propone un trabajo conjunto entre gobiernos provinciales, universidades y bancos de germoplasma.
Por qué importa proteger al caldén
Los bosques de caldén forman parte de ambientes únicos del país y son fundamentales para la estabilidad ecológica de las zonas semiáridas donde crecen. Además de su rol en la captura de carbono y el mantenimiento del suelo, estos bosques sostienen fauna silvestre y regulan la dinámica hídrica local. Según el comunicado, en la provincia de Córdoba hoy sobreviven unas 50.000 hectáreas de caldén, una fracción reducida respecto de las extensiones originales.
Amenazas y síntomas de degradación
El convenio señala que los bosques de caldén enfrentan procesos de degradación y arbustización que reducen la productividad del ecosistema y aumentan el riesgo de incendios. La pérdida de ejemplares y la fragmentación de parches forestales comprometen la conectividad ecológica y la capacidad del paisaje para recuperar su funcionalidad después de disturbios.
Qué propone el acuerdo
El convenio firmado en la Estancia Ralicó es un marco de colaboración interprovincial para diseñar programas conjuntos de conservación del caldén. La ministra de Ambiente de Córdoba, Victoria Flores, destacó que el pacto permite “hablar de ambiente sin jurisdicciones” e incorporar a los productores rurales en la estrategia.
El texto oficial remarca la participación de universidades nacionales y bancos de germoplasma para asegurar la preservación del material genético. No obstante, el comunicado difundido por las provincias no listó de manera completa las medidas puntuales del plan de acción inmediata; el detalle operativo —por ejemplo metas por año, presupuesto asignado y responsabilidades administrativas concretas— no está incluido en la versión pública disponible.
Colaboración entre el Estado y el sector productivo
Flores subrayó la importancia de integrar a productores rurales en la estrategia de conservación, lo que sugiere medidas de manejo sustentable en campos mixtos y líneas de trabajo destinadas a compatibilizar producción y conservación. El convenio, según la firma, contempla también investigación científica y el resguardo de germoplasma para asegurar la variabilidad genética de la especie.
Impacto potencial y desafíos
Proteger al caldén tiene implicancias locales y regionales: además de contribuir al secuestro de carbono, ayuda a reducir la vulnerabilidad frente a incendios y a sostener servicios ecosistémicos de importancia para comunidades rurales. Sin embargo, los desafíos incluyen la coordinación efectiva entre jurisdicciones, financiamiento a largo plazo y políticas que desincentiven la conversión de bosques a otros usos.
Contexto y patrimonio cultural
Los caldenes forman parte del paisaje cultural de la región y conectan con raíces históricas de la población. El convenio destaca esa dimensión cultural junto con los valores ecológicos: preservar al caldén no solo es conservar árboles sino mantener elementos que sostienen identidad y memoria local.
Próximos pasos
Según el acto de firma, las provincias avanzarán en mesas técnicas con universidades y bancos de germoplasma para diseñar proyectos concretos. Por ahora, resta que los gobiernos publiquen el plan operativo con plazos, presupuesto y acciones precisas para que la iniciativa pueda evaluarse y monitorearse en el tiempo.
Fuente: La Voz
