Viernes, 26 Diciembre 2025
Cementerio virtual de la AMIA registra 3500 usuarios mensuales

Cementerio virtual: cómo AMIA permite recordar a los seres queridos a la distancia

La AMIA lanzó un cementerio virtual con 250000 sepulturas registradas; permite encender velas, dejar mensajes y contratar servicios estéticos desde $5000 hasta $247000.
Personas frente a pantallas y un cementerio, ilustración sobre cementerio virtual
Personas frente a pantallas y un cementerio, ilustración sobre cementerio virtual

La nueva herramienta para el duelo a distancia

El cementerio virtual de la AMIA es una plataforma que permite rendir homenaje a familiares fallecidos mediante un cementerio virtual, una opción que combina memoria y tecnología ante la baja de visitas presenciales. La herramienta reúne información de alrededor de 250000 sepulturas y recibe unos 3500 usuarios por mes, y ofrece funciones como encender velas virtuales, dejar mensajes y contratar servicios estéticos para las tumbas.


La posibilidad de acceder por internet a la ficha de una sepultura surge como respuesta a una tendencia que se acentuó con la pandemia: la reducción de visitas presenciales a los cementerios. Salvador Auday Chomy, director de sepelios de la mutual judía, explica que la plataforma intenta ser “un puente para acercarnos a nuestros familiares que ya no están”.

El ingreso se realiza desde cementeriovirtualamia.org.ar. Basta buscar por nombre, apellido o fecha de fallecimiento para encontrar la ficha de la persona y acceder a las opciones disponibles: encender una vela, colocar una piedra simbólica, actualizar o cambiar fotos, y escribir mensajes o anécdotas.

Servicios pagos y control de contenidos

La plataforma también ofrece servicios pagados para el mantenimiento o la «puesta al día» de una sepultura: desde la toma de una foto actualizada del lugar, repintado de letras, recambio de plantas, limpieza y reacondicionamiento del jardín, hasta la colocación de una cabecera de acrílico o una laja con frase recordatoria. Los precios informados por la AMIA van desde $5000 hasta $247000 según la selección de servicios.

El sitio integra un filtro automático que controla las publicaciones y rechaza mensajes con contenido ofensivo o malicioso. No hace falta ser familiar directo: amigos o conocidos pueden dejar una vela virtual o un texto conmemorativo, aunque la plataforma actúa como moderadora para preservar el carácter de recogimiento del espacio.

Experiencias de usuarios

Usuarios que viven en el exterior valoran la herramienta como un ritual posible a la distancia. Graciela Scherman, desde Haifa, describe que se conecta semanalmente: enciende velas, coloca piedras y escribe mensajes; afirma que el gesto la ayuda a sostener la memoria de su padre y a atravesar fechas difíciles. Marina Kusevitzky, radicada en Andorra, dice que el recurso le permitió «mimar el alma» cuando no pudo viajar tras la muerte de su padre por Covid en 2021.

Hay también testimonios de quienes prefieren la visita presencial: Daniel Berliner, que sigue yendo al cementerio, reconoce que la virtualidad «no es lo mismo» pero admite que se trata de una herramienta útil para quienes no pueden trasladarse.

Antecedentes y desarrollo

En la Argentina hubo otras iniciativas: Paz Eterna, creada por Jorge Luis Calvigioni en Pergamino, y una plataforma impulsada en San Luis por el ex diputado Francisco Irusta. El sistema de la AMIA es el más amplio difundido hasta ahora porque abarca los cuatro cementerios comunitarios del área metropolitana: La Tablada, Ciudadela, Liniers y Berazategui.

Calvigioni recuerda que su proyecto pionero (1999) fue un boom en su momento y que la idea resonó internacionalmente; reconoce que su sitio quedó obsoleto pero que existe la intención de retomarlo.

Mirada sociológica

La socióloga Carolina Duek señala dos efectos principales: un efecto reparatorio para quienes están lejos y el valor ritual de la práctica de visitar tumbas. Plantea, además, una pregunta clave: si la virtualidad ofrece la posibilidad de «reemplazar» la presencia física, ¿dónde quedan los límites entre la pantalla y el rito con cuerpo? Duek advierte que no se discute la sinceridad del duelo, sino hasta qué punto la tecnología modifica prácticas culturales y comunitarias consolidadas.


Fuente: AMIA / datos provistos en la plataforma, periodo: actualidad


Qué ofrece y para quién

La plataforma resulta especialmente útil para familiares que viven en el exterior, para personas con dificultades de traslado o para quienes forman parte de familias que han ido abandonando la práctica de las visitas dominicales a los cementerios. Para usuarios como Gerardo Russki (53), la posibilidad de contratar servicios de acondicionamiento a distancia (él pagó $80000 por repintado y recambio de plantas) es una solución práctica cuando el traslado resulta complejo.

Desde la AMIA subrayan que la herramienta no pretende suplantar la experiencia presencial: la propuesta es complementar el recuerdo y facilitar la conexión cuando la geografía o las circunstancias impiden la visita.


Cómo acceder: ingresar a cementeriovirtualamia.org.ar y buscar por nombre, apellido o fecha de fallecimiento.

Fuentes: Clarín