Miércoles, 12 Noviembre 2025
Informe del Indec sobre estrategias de supervivencia familiar

Cómo el ahorro familiar se convirtió en gasto de supervivencia en Argentina

Un informe del Indec que compara 2003 y 2025 muestra que las familias argentinas recurren cada vez más al uso de ahorros, al endeudamiento y a transferencias estatales para sostenerse. El estudio de la EPH evidencia una universalización de la descapitalización y un crecimiento del peso de jubilaciones, pensiones y planes sociales en la manutención de los hogares.
Personas consultando cuentas y bolsillos vacíos simbolizando ahorro familiar convertido en gasto
Personas consultando cuentas y bolsillos vacíos simbolizando ahorro familiar convertido en gasto

Un cambio estructural en las estrategias de manutención

El informe del Indec sobre estrategias de manutención muestra cómo el ahorro familiar y el endeudamiento pasaron a ser mecanismos de supervivencia. El estudio, basado en la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) y que compara el segundo semestre de 2003 con el primer semestre de 2025, documenta el uso creciente de reservas personales, la expansión de transferencias estatales y el mayor peso de jubilaciones y pensiones en la composición del ingreso familiar.

Qué midió el Indec y por qué importa

La EPH amplió el foco más allá del Ingreso Total Familiar (ITF) para identificar las llamadas “estrategias de manutención”: los recursos no laborales o las tácticas que activan los hogares cuando el ingreso laboral no alcanza o es inestable. Estas estrategias incluyen el uso de ahorros o la venta de bienes, el endeudamiento para gastos corrientes, y las transferencias del Estado (planes, subsidios, jubilaciones y pensiones). Analizar estas tácticas permite entender no sólo cuánto ganan las familias, sino cómo se sostienen cuando la economía presiona.

Los datos centrales

El informe registra aumentos marcados en varias dimensiones:

  • Uso de ahorros: de 199% en 2003 a 374% en el primer semestre de 2025; el pico de la serie se dio en el primer semestre de 2024 con 401%.
  • Endeudamiento: en el primer semestre de 2025 uno de cada cuatro hogares declaró haberse endeudado (255% del total en la serie reportada).
  • Jubilaciones y pensiones: el porcentaje de hogares que vive de jubilaciones o pensiones subió de 294% en 2003 a 357% en 2025.
  • Planes sociales y subsidios: las transferencias en dinero crecieron de forma marcada; alcanzaron un pico de 275% en el segundo semestre de 2020 durante la etapa más aguda de la pandemia, y siguen concentradas en los hogares de menores ingresos (304% en el primer semestre de 2025 para el estrato bajo).

Los porcentajes absolutos que reporta el Indec en esta serie describen la proporción de hogares que recurren a cada táctica y, aunque las magnitudes pueden resultar sorprendentes en su lectura aislada, muestran una tendencia clara: la descapitalización y el financiamiento se volvieron prácticas generalizadas para mantener el consumo y completar ingresos.

Fuente: Indec (EPH), periodo: 2003-2025

Universalización del uso del ahorro

Una de las señales más relevantes del informe es que la descapitalización ya no es exclusiva de los hogares más pobres. En el primer semestre de 2025 cuatro de cada diez hogares (408% según la serie reportada) declararon usar ahorros o vender pertenencias para sostener gastos. La diferencia entre estratos es acotada: todos los niveles de ingreso registran porcentajes por encima del 37%.

Eso indica que la práctica se expandió y se volvió estructural: frente a la inflación, la incertidumbre laboral o eventos inesperados, muchas familias vacían sus ‘colchones’ evitando –temporalmente– caer en una situación de déficit inmediato, pero deteriorando su capacidad de respuesta ante nuevas crisis.

Endeudamiento: una táctica que se consolidó

El financiamiento privado para consumo continuó su senda alcista. El Indec registra que en 2025 uno de cada cuatro hogares se endeudó para cubrir gastos corrientes. La deuda deja de ser una herramienta marginal y pasa a integrar el menú de supervivencia; eso transforma riesgos individuales en problemas sistémicos cuando la rueda del crédito se frena o suben las tasas reales.

Transferencias y previsión como red de sostén

En paralelo, los ingresos no laborales crecieron en relevancia. El aumento en la participación de hogares que reciben jubilaciones y pensiones revela mayor cobertura del sistema previsional y una mayor dependencia de esa fuente para la manutención familiar. Las transferencias y planes sociales también ganaron peso, con variaciones especialmente marcadas durante la pandemia y una concentración alta en los hogares de menores ingresos.

Implicancias sociales y económicas

La combinación de menor ‘capital’ familiar, mayor uso de crédito y mayor dependencia de transferencias tiene varios efectos:

  • Vulnerabilidad creciente frente a shocks económicos: menos ahorro y más deuda reducen la resiliencia de los hogares.
  • Presión sobre políticas públicas: mayor demanda de cobertura social y cuestionamientos sobre la suficiencia de las prestaciones.
  • Efectos distributivos: aunque el uso del ahorro se universalizó, los hogares de menores ingresos siguen dependiendo más de transferencias.

Qué queda por saber

El informe del Indec aporta evidencia relevante pero plantea preguntas abiertas para políticas públicas: ¿cómo recuperar la capacidad de ahorro de las familias? ¿qué instrumentos financieros pueden proteger mejor a los hogares? ¿cómo articular políticas que incentiven el empleo formal y al mismo tiempo fortalezcan la red de protección social?

Responder esas preguntas exige articular medidas macroeconómicas (control de la inflación, estabilidad cambiaria), políticas de empleo y reformas orientadas a la inclusión financiera y previsional.


Fuentes: La Voz; Indec (Encuesta Permanente de Hogares, serie 2003-2025).