Cristian Traverso rechaza un posible pase de Miguel Borja a Boca

Rechazo público a la llegada de Miguel Borja: la voz de un emblema xeneize
Miguel Borja, delantero colombiano cuyo contrato con River finaliza en diciembre, declaró que no cierra las puertas a ninguna oferta y abrió la posibilidad de regresar a la Argentina, lo que despertó interés en Boca. Sin embargo, un emblema del club, Cristian Traverso, expresó públicamente su rechazo y afirmó que Boca no debe ser lugar de revancha para nadie.
El intercambio de señales entre el delantero y clubes argentinos generó una reacción inmediata en redes. En su participación en el programa ESPN F90, Borja dejó la puerta abierta a volver al país; días después, Traverso publicó en Instagram: "Yo no tengo dudas. Boca no es lugar de revancha para nadie. Humilde punto de vista", y acompañó su post con una foto del jugador besándose la camiseta de River.
Repercusiones internas y sabor a conflicto
La postura de Traverso alimenta el debate sobre la idoneidad de incorporar a un futbolista que mostró identificación pública con la camiseta de un rival histórico. Para muchos hinchas xeneizes, ese gesto tiene un valor simbólico que complica cualquier negociación inmediata, aunque la definición final dependerá de los dirigentes y del director deportivo de Boca.
La versión sobre la deuda salarial
Además de la discusión deportiva y simbólica, circuló un dato económico que complica la imagen del delantero: según el periodista Renzo Pantich, River tendría una deuda salarial con Borja cercana a los 500.000 dólares y, por la situación de negociación, el club estaría decidido a no abonarla. Esa postura —cuando es cierta— suele buscar ejercer presión en una disputa contractual; la versión fue difundida por medios que citaron fuentes internas del Monumental.
Desde el punto de vista del jugador, la conclusión del ciclo en River tras tres años y medio y una temporada baja en rendimiento lo dejan en la búsqueda de continuidad y opciones. En ese contexto, su expresión pública sobre no cerrar puertas puede interpretarse como un movimiento para ampliar alternativas de mercado.
Qué implica un eventual cruce al rival histórico
Un pase de un jugador identificado con River a Boca siempre genera tensión deportiva y simbólica. Para la dirigencia de Boca la decisión pasa por evaluar impacto futbolístico, costo salarial y reacción del público. Para los socios y los hinchas más sensibles a símbolos, el gesto del beso a la camiseta rival suele ser un obstáculo irreductible.
Si la dirigencia decide avanzar, tendrá que negociar con el representante del jugador y —en caso de que la deuda mencionada exista— resolver el tema con River o con el propio futbolista. En lo inmediato, la postura pública de Traverso suma presión mediática sobre la decisión dirigencial y alimenta la discusión entre quienes priorizan lo deportivo y quienes consideran que ciertas actitudes públicas afectan la identidad del club.
Contexto y conclusión
La posibilidad de que Borja recale en Boca, más allá de lo que digan los discursos, dependerá de negociaciones privadas y del criterio deportivo del cuerpo técnico que quede en la institución. Mientras tanto, la expresión de un emblema como Traverso marca la resistencia simbólica que encontrará cualquier intento de concretar la llegada del colombiano a Brandsen 805.
Fuente: El Intransigente
