Sábado, 20 Diciembre 2025
Incertidumbre en el plan de acumulación de reservas

El plan reservas, un viejo pedido de los fondos a Caputo, todavía genera dudas entre inversores

El Gobierno anunció un esquema para acumular reservas y comprar en el MULC; inversores valoran el gesto pero piden reglas claras y mayor volumen para confiar en la compra de bonos argentinos.
Gráfica financiera y billetes en contexto de reservas
Gráfica financiera y billetes en contexto de reservas

Caputo prometió mayor acumulación de reservas; inversores piden claridad sobre volumen y mecanismos

Las palabras clave del mercado —reservas, Banco Central, MULC y bonos argentinos— están en el centro del debate después del anuncio oficial sobre la actualización de las bandas y la promesa de acumulación de reservas. El Gobierno presentó el esquema con la intención de seducir a los grandes tenedores de deuda, pero persisten dudas sobre cuánto comprará realmente el Banco Central y cómo se instrumentarán esas compras.


Qué se anunció y por qué importa

El equipo económico comunicó un esquema que incluye compras en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) por un monto diario alineado con un 5% del volumen operado y la posibilidad de compras en bloque. La intención política es acumular reservas y mejorar la confianza para atraer demanda por bonos argentinos en los mercados locales e internacionales.

Para muchos inversores la clave no es el anuncio en sí, sino el "delivery": cuánto y con qué reglas operativas efectivas hará las compras el Banco Central (BCRA). Esa incertidumbre limita la convicción de los fondos de "real money" (grandes administradores institucionales) a la hora de entrar de manera sostenida.

Qué dicen los actores citados

Juan Manuel Pazos, de One618, estima que la compra en el MULC si se limita al 5% del volumen implicaría cerca de US$4.000 millones al año, menos de la meta oficial de US$10.000 millones. En su análisis —citado por el mercado— la otra pata debería ser la compra en bloque para acercarse al objetivo.

La consultora 1816 advirtió que el comunicado oficial fue ambiguo en varios puntos operativos: cómo se medirá el volumen del MULC y cómo se aplicará la política de tasas. Esa ambigüedad, dicen, deja margen para discrecionalidad por parte del equipo económico.

Operativa y limitaciones

El MULC es el mercado oficial de cambios donde se negocian la mayoría de las operaciones formales en dólares. El porcentaje del 5% se refiere al volumen de las ruedas en ese mercado; sin embargo, no está claro si el cálculo incluirá o excluirá determinados tipos de operaciones ni cómo se computarán las ruedas en días de bajo volumen.

Además, la remonetización que menciona el Gobierno —la reincorporación de dólares a la economía formal— depende de que los privados vendan billetes por debajo del techo de la banda. Si la mayor parte de la oferta se concentra por arriba del techo, la compra del BCRA en el MULC no alcanzará para cumplir la meta prevista.

Impacto sobre bonos y tipos de inversores

El anuncio tuvo un efecto positivo inicial en los precios de los bonos: los rendimientos bajaron y el riesgo país se redujo notablemente respecto de niveles previos. Pero la llegada de los fondos más grandes y conservadores (BlackRock, PIMCO, Templeton, entre otros) dependerá de señales más fuertes, como una menor discrecionalidad cambiaria y mayor previsibilidad en la política monetaria.

En la práctica, los fondos "distressed" y "high yield" ya han realizado parte de su ajuste; los que faltan por entrar son los administradores institucionales que buscan menor volatilidad y reglas claras.

Escenarios y plazos

Si el BCRA complementa compras en el MULC con operaciones en bloque y reduce restricciones cambiarias en forma gradual, la probabilidad de acumular una porción sustantiva de las reservas prometidas aumenta. Sin ese combo, las compras del 5% podrían quedar muy por debajo de la meta de US$10.000 millones anualizada.

En términos prácticos, el mercado esperará señales de ejecución en los próximos meses: definición clara de la metodología de cálculo de volumen, calendario de compras y reglas para la intervención en distintos segmentos del mercado cambiario.

Conclusión

El anuncio satisface una demanda explícita de los inversores: un plan para reconstruir reservas. Pero la reacción del mercado muestra que los anuncios sólo generan expectativa; la convicción llegará con claridad operativa y consistencia en el tiempo. Hasta entonces, inversores e instituciones internacionales seguirán adoptando una postura cautelosa.


Fuentes: El Economista