En EE. UU., Milei mostró confianza y hasta le dio consejos a Trump

Milei en Estados Unidos: confianza pública y señales políticas
Javier Milei, durante su visita a Estados Unidos, evidenció una fuerte confianza política al permitir incluso un consejo público dirigido a Donald Trump; en los discursos mezcló bromas sobre figuras públicas, alusión al "riesgo kuka" y gestos de celebridad que fueron comentados en la prensa. El liderazgo que exhibió en el exterior coincide con declaraciones sobre el futuro del Congreso y el plan de reformas que su espacio pretende impulsar.
En distintas intervenciones, Milei anticipó que «a partir de diciembre tendremos el Congreso más reformista de la historia», frase que refleja ambición política pero que encuentra límites en la aritmética legislativa. Aunque su coalición obtuvo un resultado electoral fuerte, no cuenta con mayorías automáticas para aprobar medidas sin negociaciones con sectores dialoguistas o gobernadores que exigen un intercambio más pragmático.
Entre la teatralidad y la política
La visita puso de manifiesto una mezcla entre estrategia comunicacional y búsqueda de legitimidad internacional: por un lado, el presidente aprovechó la exposición para exhibir confianza y construir imagen; por otro, la recepción y los gestos con líderes y actores económicos fueron interpretados como intentos de anclar apoyos externos para la agenda doméstica.
La necesidad de negociar
Aun frente a un triunfo electoral claro, gobernar requiere consensos. Varias fuentes consultadas por la prensa señalan que, aunque con un tercio de bancas un espacio puede evitar la anulación de vetos, no es suficiente para aprobar reformas estructurales sin acuerdos. Gobernadores y legisladores provinciales, preocupados por recursos para obras y asistencia, muestran disposición a intercambiar apoyos por fondos y proyectos concretos.
Actores internacionales y mensajes económicos
La gira también tuvo un componente económico: encuentros y manifestaciones de apoyo de actores financieros internacionales fueron destacadas por el oficialismo como señales favorables. Sin embargo, los observadores recuerdan que el respaldo externo no exime de la necesidad de construir mayorías domésticas para las reformas más controversiales, como la laboral o los cambios en la estructura del Estado.
Riesgos políticos y reacción interna
En el seno del oficialismo hay quienes ven la estrategia como una apuesta a la movilización de bases y al peso de la imagen presidencial. En las provincias, en tanto, priman las señales prácticas: la administración de recursos, la ejecución de obras y los mecanismos de negociación presupuestaria. Analistas locales destacan que la emergencia social y la necesidad de dólares condicionan las decisiones y empujan hacia consensos con interlocutores provinciales e internacionales.
Qué puede pasar en el Congreso
El escenario legislativo anticipa negociación. Algunos temas pueden concitar acuerdos puntuales con sectores peronistas dialoguistas —por ejemplo, en designaciones judiciales o proyectos económicos de consenso— mientras que otras iniciativas de mayor corte ideológico requerirán abrir más canales de diálogo. La experiencia política muestra que los vetos y la estrategia de presión no bastan para sostener un ciclo de transformaciones sin ofrecer incentivos a quienes controlan recursos o jurisdicciones claves.
Fuente: El Día
