Estudiantes tucumanas logran que su propuesta ecológica llegue al debate legislativo

Proyecto escolar avanza en la Legislatura: sello para producciones sustentables
La iniciativa llamada "Marca Tucumán Sustentable", impulsada por alumnas del Colegio María Auxiliadora y presentada en Hackear Tucumán, obtuvo dictamen en la Comisión de Medio Ambiente de la Legislatura provincial. El proyecto plantea crear un sello oficial para identificar productos y servicios con prácticas ambientales responsables, que se gestionaría desde el Instituto de Desarrollo Productivo de Tucumán (IDEP).
El programa propone articular el IDEP con la Secretaría de Medio Ambiente y el Consejo Asesor de la Marca Tucumán para certificar procesos que cumplan criterios como eficiencia energética, reducción de residuos, manejo de emisiones y respeto de la normativa ambiental vigente. La certificación tendría una duración inicial de dos años con posibilidad de renovación y ofrecería beneficios de promoción y financiamiento.
Cómo nació la propuesta
El proyecto surgió durante Hackear Tucumán, un concurso donde estudiantes desarrollan ideas para mejorar la provincia. Las autoras expusieron su trabajo ante legisladores de distintos bloques y defendieron la viabilidad técnica y educativa de la iniciativa. En la Comisión se destacó la intención de sumar educación ambiental y participación juvenil al diseño de políticas públicas.
Alcances y próximos pasos
Si la Legislatura convierte el dictamen en ley, la Marca Tucumán Sustentable funcionaría como una extensión de la Ley N.º 8.979 sobre identidad provincial y se reglamentaría para definir beneficios concretos: incentivos fiscales o líneas de crédito, apoyo en ferias y plataformas de comercialización, y programas de formación para pequeños productores. El expediente ahora debe seguir el trámite legislativo pleno para su debate y votación en salas.
Por qué importa
El proyecto apunta a fortalecer la competitividad local al asociar la producción provincial con prácticas sustentables, algo que demanda tanto el mercado interno como compradores externos. Además, incluye un componente pedagógico: promover la educación ambiental en escuelas y posicionar a jóvenes como actores activos en la agenda pública.
Fuente: La Gaceta
