Festival Daltónica 2025: música independiente y estética psicodélica en Luján

Un día de festival lejos del ruido de la ciudad
El Festival Daltónica 2025 reunió música independiente, producción autogestiva y una estética clara hacia la psicodelia de los años 60-80 en La Oración de Luján, a 15 kilómetros de Pilar. Doce horas de programación y tres espacios definieron la cuarta edición del encuentro.
El predio se organizó en tres sectores interconectados: el escenario Andes, el Fin del Mundo y el del Bosque. Hubo reposeras, almohadones y fardos de pasto que ayudaron a crear una atmósfera relajada y comunitaria. Antes de la apertura oficial, la propuesta incluyó una sesión de arteterapia llamada Un Sueño Inmersivo, acompañada por las guitarras de Boris y Zambo.
En el escenario Andes inauguraron Ale Cares y los Magos Farciar con temas de su último EP Trígono del río, y repasaron canciones de Pescado 3. Desde Tandil llegó Zenón Pereyra con repertorio de sus tres discos; en el sector íntimo Aguas Hermanas ofreció una performance de handpan que invitó a la contemplación.
Isla Mujeres subió al principal con un show que mezcló distorsión rockera y melodías pop; la banda cerró el tramo diurno con su recorrido reciente, que incluyó giras al exterior tras Barato Ideal (2024). Más tarde, la artista local An Espil se presentó junto a 442, combinando referencias a la cultura pop de los 90 con canciones de su trayectoria solista.
La noche culminó con Fonso y Las Paritarias, que trajeron rock, folklore y baladas y cerraron una jornada en la que el público no dejó de bailar. El line-up buscó balancear propuestas consolidadas y escenas emergentes, con una producción enfocada en la autogestión y el intercambio artístico.
Producción y experiencia
El Festival Daltónica se caracteriza por su formato independiente: logística local, venta de tickets controlada y una estética que prioriza la experiencia colectiva por sobre la masificación. La elección del lugar —una ruta de tierra y árboles que antecede al predio— reforzó la idea de un festival “fuera de la ciudad”.
Para bandas y público, el encuentro funcionó como espacio de vínculo directo entre artistas, sellos independientes y promotores: un circuito alternativo que sostiene la escena fuera de los grandes centros urbanos.
Fuentes: Clarín
