Idesa advierte que el crecimiento reciente responde al trabajo por cuenta propia

Informe de Idesa: el empleo asalariado registrado sigue en retroceso
El Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa) afirma que la recuperación del nivel de ocupación en la Argentina se explica en su totalidad por el aumento del trabajo por cuenta propia y no por la creación de empleo asalariado registrado en empresas privadas. El diagnóstico señala al estancamiento productivo y al marco laboral y judicial como factores que desincentivan la contratación formal.
El informe de Idesa compara datos oficiales del INDEC entre el tercer trimestre de 2025 y el mismo período de 2023. Según el análisis citado, el PBI creció 1,3% en ese lapso y el empleo urbano aumentó 2,3%, pero con una composición desigual: el empleo no asalariado creció cerca de 14%, mientras que el empleo asalariado registrado en el sector privado cayó 3% y el resto de las ocupaciones (empleo público y asalariado no registrado) se redujo 1%.
Fuente: Idesa / INDEC, periodo: tercer trimestre 2025 vs tercer trimestre 2023
Diagnóstico y causas señaladas
Para Idesa, la explicación de este fenómeno combina dos factores: por un lado, la producción estancada desde 2011 limita la demanda de mano de obra por parte de las empresas; por otro, un marco normativo laboral desactualizado y la aplicación heterogénea de las normas por parte de los tribunales laborales desalientan la formalización. El instituto destaca además la litigiosidad y la falta de implementación de instrumentos como el Cuerpo Médico Forense en las provincias como ejemplos que agravan la incertidumbre jurídica.
El informe subraya que, aun cuando la economía recuperara niveles de actividad más altos, sin una reforma laboral efectiva y sin cambios en la conducta de la Justicia laboral provinciana el impacto sobre el empleo registrado podría ser limitado.
Informalidad y cuentapropismo
El documento menciona datos complementarios de la Secretaría de Trabajo que indican que alrededor del 80% de los cuentapropistas no están inscriptos en el Monotributo, lo que sugiere, según Idesa, que el crecimiento del trabajo independiente responde en gran medida a la necesidad de generar ingresos de subsistencia más que a una vocación emprendedora.
Ese cuadro de informalidad plantea desafíos concretos: trabajadores que realizan actividades productivas sin acceso pleno a cobertura social, jubilatoria y a derechos laborales; empleadores que, por la incertidumbre jurídica y los costos asociados, optan por no incorporar personal en relación de dependencia; y una demanda social que termina en formas de autoempleo no registradas.
La reforma laboral y su aplicación
El informe recuerda que el Gobierno proyecta que una combinación de orden macroeconómico y reformas estructurales contribuya a la generación de empleo de calidad. Sin embargo, Idesa advierte que la discusión legislativa es sólo una parte del proceso: la aplicación de las leyes por parte de los tribunales provinciales será clave para que los cambios se traduzcan en más empleo formal.
Idesa ejemplifica que una ley nacional no alcanza si su implementación práctica depende de plazos, estructuras y criterios judiciales provinciales distintos, o de la falta de recursos administrativos en cada jurisdicción. En el informe se sintetiza la idea de que la autonomía provincial y la independencia judicial no eximen a los tribunales de ajustarse a criterios uniformes que permitan previsibilidad a empleadores y trabajadores.
Qué impacto tiene para la población
Desde la perspectiva del empleo, la sustitución de puestos asalariados por ocupaciones no registradas o por cuenta propia afecta la calidad del empleo: menores salarios reales, menor acceso a aportes previsionales y cobertura social, mayor vulnerabilidad ante variaciones de la demanda y reducción de la capacidad de negociación colectiva. Para el mercado laboral, la tendencia implica también mayor dificultad para consolidar empleo de largo plazo en el sector privado registrado.
Fuentes: Perfil (Idesa / INDEC)
