Industria del acero opera al 60% y reclama medidas a Milei

Plantas con capacidad ociosa y urgencia de medidas para la industria del acero
La industria del acero en Argentina enfrenta una utilización productiva de alrededor del 60% y reclama al gobierno de Javier Milei medidas que reduzcan impuestos, abaraten costos laborales, alivien el acceso al crédito y limiten el ingreso de importaciones chinas a bajo precio. Ejecutivos de empresas como Ternium y ArcelorMittal‑Acindar advirtieron en Cartagena sobre el riesgo de desindustrialización y pidieron una apertura ordenada del cepo cambiario.
En la cumbre internacional celebrada en Cartagena participaron representantes de las principales siderúrgicas que operan en el país. Allí se expusieron distintas causas del bajo uso de la capacidad: caída de la demanda local, competencia con importaciones chinas a precios muy bajos, eliminación de controles de calidad y una presión impositiva considerada por las empresas como “distorsiva”, con impuestos provinciales y municipales además de tributos como el impuesto al cheque.
Fuente: informes de ejecutivos en la cumbre del Acero, noviembre 2025; periodo: actualidad
Según los ejecutivos, el escenario global también afecta: se estima que el mundo podría tener cerca de 700 millones de toneladas de capacidad ociosa el próximo año. En regiones como Europa y Estados Unidos crecen las medidas proteccionistas; en Sudamérica, los participantes destacaron que la región está «totalmente abierta» frente a las importaciones, lo que agrava la presión sobre las plantas locales, que necesitan niveles de utilización cercanos al 80% para garantizar rentabilidad y continuidad de inversión.
Reclamos concretos
Los pedidos al gobierno incluyen:
- Revisar la política arancelaria y aplicar salvaguardias frente a importaciones a precios predatorios.
- Reducir la carga impositiva considerada distorsiva, especialmente ingresos brutos, impuesto al cheque y tasas municipales.
- Facilitar el acceso al crédito para reactivar la demanda y la inversión en automatización y tecnología.
- Abrir de forma ordenada el cepo cambiario para permitir el uso de divisas por parte de las empresas y mejorar la confianza para inversiones.
Martín Berardi, CEO de Ternium, señaló que la Argentina debería aplicar una apertura alineada con los países occidentales y evitar una “apertura restricta” que deje la industria local expuesta. Federico Amos, CEO de ArcelorMittal‑Acindar, advirtió sobre «un proceso de desindustrialización» si no se generan condiciones de competencia equivalentes y estabilidad macroeconómica. Ambos mostraron un moderado optimismo respecto a 2026, ligado a expectativas de reformas estructurales y mayor respaldo externo, en particular la alianza con Estados Unidos.
Impacto social y regional
Las empresas destacaron que la siderurgia genera empleos de alta calidad, impulsa cadenas de valor y beneficia a localidades donde están radicadas las plantas. Por ello, alertan que la pérdida de actividad puede tener efectos sociales y productivos relevantes en regiones industriales.
La discusión en la cumbre puso en evidencia la necesidad de una estrategia integral: combinar medidas comerciales de defensa, reducción de costos internos y políticas que incentiven la inversión y la recuperación del crédito sin descuidar la transparencia y la competencia leal.
Fuentes: Clarín
