La nueva estrategia de Caputo para que el riesgo país retome la baja y converja a los 400 puntos básicos
El Gobierno apuesta a reducir la dependencia de los mercados extranjeros y fortalecer el mercado local
La estrategia del ministro Luis "Toto" Caputo busca bajar el riesgo país y recuperar el acceso al financiamiento internacional sin mostrar desesperación por emitir deuda en el exterior. El objetivo declarado es que el indicador elaborado por JP Morgan converja hacia los 400 puntos básicos en el primer trimestre de 2026.
Ante el nivel del riesgo país —que este año se acercó en dos oportunidades a la zona de 550 puntos básicos—, el equipo económico plantea una táctica conservadora: limitar la salida a los mercados internacionales y priorizar herramientas de financiamiento local. El Gobierno sostiene que emitir droga de forma masiva en Wall Street podría espantar a inversores y elevar las tasas de interés exigidas.
Plazos y recursos: para enfrentar los vencimientos de enero, el Tesoro declaró haber reunido parte del dinero necesario (alrededor de USD 2.500 millones) para el pago estimado en unos USD 4.200 millones. En lo que va de diciembre hubo colocaciones en el mercado doméstico: la emisión del Bonar 29 recaudó USD 910 millones. Además, según el ministro, existen propuestas de financiamiento de bancos internacionales por un total de USD 7.000 millones, que se considerarán sólo como última opción.
Medidas para fortalecer el mercado local incluyen impulsar el mercado de capitales y crear el Fondo de Asistencia Laboral previsto en el proyecto de reforma laboral, que se nutriría con 3 puntos de cargas patronales que hoy van a la ANSES. La idea es ofrecer instrumentos atractivos en pesos y en dólares locales para que el ahorro doméstico se dirija a títulos argentinos y así reducir la dependencia del financiamiento externo.
Contexto internacional: la baja de tasas en Estados Unidos funciona como una ventana de oportunidad para deuda emergente, aumentando el apetito por emisores con rendimientos superiores. Sin embargo, el Gobierno busca combinar esa mejora externa con señales de solidez doméstica para lograr la caída del riesgo país sin recurrir a emisiones masivas que podrían aumentar las tasas exigidas por los mercados.
En definitiva, la apuesta oficial es una mezcla de prudencia en la colocación en el exterior, uso estratégico del mercado local y acumulación de reservas para afrontar vencimientos próximos. Los analistas coinciden en que perforar los 500 puntos básicos es condición necesaria para financiarse a tasas más bajas; alcanzar 400 puntos será un desafío que dependerá tanto de factores internacionales como de la marca de la política económica doméstica.
Fuente: Infobae
