Domingo, 16 Noviembre 2025
Vivencia para emprendedores y líderes

Silicon Valley: la vivencia que transforma miradas y potencia decisiones

La Experiencia Silicon Valley de la Fundación del Tucumán combina recorridos, encuentros y talleres para exponer a emprendedores y profesionales a una cultura de colaboración, metodologías ágiles y tolerancia al error que buscan transformar la forma de emprender y liderar.
Panorama de Silicon Valley con oficinas y áreas verdes
Panorama de Silicon Valley con oficinas y áreas verdes

Una experiencia que cambia la forma de emprender

Silicon Valley y la Experiencia impulsada por la Fundación del Tucumán aparecen como palabras clave para quienes buscan renovar su forma de pensar el emprendimiento: la vivencia promete no solo contactos sino un cambio de mentalidad sobre innovación, colaboración y riesgo calculado.

Qué es la Experiencia Silicon Valley

La iniciativa de la Fundación del Tucumán propone recorridos por el ecosistema tecnológico, encuentros con referentes y talleres orientados a trasladar metodologías de trabajo. Según testimonios difundidos por la organización, el objetivo es exponer a participantes a una cultura de colaboración y experimentación que no se limita a la tecnología, sino que modifica la forma de pensar proyectos, equipos y estrategias de crecimiento.

Testimonios: impacto personal y profesional

Alberto Núñez, director ejecutivo de la Fundación, resume la experiencia en una lección: aprender a valorar la curiosidad y la tolerancia al error como motores de innovación. Para empresarios como Franco Ponce, CEO de Alas Turismo, la visita ofreció ejemplos prácticos de colaboración entre compañías y redes de apoyo que hoy se traducen en cambios estratégicos en su empresa.

“Silicon Valley me enseñó que innovar no es tener más tecnología, sino más curiosidad, más apertura y más coraje para aprender del error”, afirma Alberto Núñez.

Otros participantes, como la nutricionista funcional Gladys Patiño, destacan el carácter transversal de la experiencia: la colaboración que observó en el ecosistema se aplica a sectores no tecnológicos y potencia resultados cuando se combina esfuerzo individual con alianzas estratégicas. Mariana Núñez Corai, de Just Be Marketing, cuenta que el viaje le permitió ampliar la ambición de su proyecto sin dejar de lado su vida personal, ilustrando el impacto en la visión profesional y balance de vida.

Qué se aprende: metodología, redes y cultura

Los ejes recurrentes en las devoluciones son tres: metodologías ágiles aplicables a distintos sectores; la construcción de redes como palanca para escalar iniciativas; y una cultura que valora compartir información y aprender de fracasos. La Fundación del Tucumán organiza la experiencia como un proceso de inmersión: no se trata sólo de visitar empresas emblemáticas, sino de interiorizar hábitos y prácticas que puedan replicarse en la realidad local.

¿A quién está dirigida?

La propuesta es consultada por emprendedores, directivos de pymes, profesionales de áreas creativas y responsables de políticas públicas interesados en conocer modelos de articulación entre sector privado, academia y redes de inversores. En la comunicación oficial se destaca que la experiencia aporta herramientas para pensar escalabilidad, gestión del talento y alianzas.

Limitaciones y preguntas a resolver

La experiencia puede resultar transformadora, pero no sustituye políticas públicas ni cambios estructurales en ecosistemas locales. Para trasladar aprendizajes se requiere adaptación: no todas las prácticas importadas funcionan igual fuera del contexto en que surgieron. Además, el acceso a la experiencia depende de cupos y financiación; la nota informativa remite a la Fundación para quienes quieran sumarse a futuras ediciones.

Conclusión

La Experiencia Silicon Valley que organiza la Fundación del Tucumán funciona, según quienes viajaron, como una palanca intelectual: produce giros de mirada que pueden traducirse en decisiones estratégicas. Para empresas y profesionales que buscan dar un salto en innovación y gestión, la vivencia plantea un punto de partida práctico para repensar modelos y ampliar redes.


Fuente: La Gaceta