Viernes, 14 Noviembre 2025
Cosecha y gestión de datos para una agricultura más eficiente

Trigo y datos: cómo la cosecha impulsa la digitalización del agro

La campaña de trigo genera grandes volúmenes de datos desde cosechadoras y sensores; para convertir esa información en decisiones hay que acordar protocolos de descarga, plataformas de procesamiento y una cooperación real entre contratistas, productores y técnicos.
Cosechadora en un lote de trigo con monitor de rendimiento
Cosechadora en un lote de trigo con monitor de rendimiento

La cosecha de trigo como oportunidad para ordenar datos productivos

La campaña de trigo ofrece una ventana para fortalecer la digitalización del agro: monitores de rendimiento, sensores y cosechadoras conectadas generan información que puede transformarse en mapas de rendimiento, diagnósticos y decisiones más precisas sobre fertilización, rotaciones y planificación. Aprovechar esos datos exige protocolos para descargarlos, procesarlos y compartirlos entre productores, contratistas y asesores.

Cuánto y qué tipo de datos se generan

Las máquinas modernas registran variables como rendimiento, humedad, velocidad de avance, eficiencia de cosecha y consumo de combustible. Según especialistas citados, cada hectárea cosechada con un monitor en funcionamiento puede producir más de 800 puntos de información vinculados a esas variables. Cuando esos registros se integran y procesan, permiten construir mapas que muestran la variabilidad espacial del lote y facilitan decisiones para la próxima campaña.

El papel de los contratistas

Los contratistas rurales ocupan un lugar central: intervienen en entre el 70% y el 80% de la superficie cosechada, por lo que se han convertido en generadores clave de datos. Su rol trasciende la prestación del servicio mecánico: con protocolos adecuados pueden certificar labores, transferir archivos y ofrecer servicios de trazabilidad que aumenten el valor agronómico de la información. Sin embargo, el desafío es que en muchos casos los archivos no se descargan correctamente o no existen acuerdos claros de transferencia.

Estado del equipamiento y brechas

En la Argentina hay un parque de más de 22.300 máquinas conectadas y se estima que alrededor del 70% de ellas son cosechadoras con algún grado de equipamiento digital (monitores, sensores, balanzas integradas o telemetría). Pese a ese grado de disponibilidad tecnológica, persiste una brecha entre tener la tecnología y usarla efectivamente: monitores sin calibración, falta de descarga de datos y ausencia de una cultura de integración de información entre actores.

Qué se necesita para transformar datos en decisiones

  • Protocolos claros de descarga y transferencia, que acuerden plazos y formatos entre contratistas y productores.
  • Herramientas y plataformas que permitan procesar y visualizar mapas de rendimiento y otros indicadores de forma ágil.
  • Capacitación en calibración de equipos y en interpretación de datos para técnicos y productores.
  • Modelos de negocio que recompensen la transparencia y la trazabilidad de los servicios prestados por contratistas.

Instituciones y actores clave

Para consolidar una agricultura más inteligente confluyen actores públicos y privados: institutos técnicos como el INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria), empresas de maquinaria, plataformas de análisis de datos, contratistas y productores. El trabajo conjunto es esencial: las herramientas tecnológicas existen, pero su impacto depende de acuerdos y prácticas que faciliten el flujo de información.

Beneficios esperables

Cuando se incorporan de manera sistemática, los datos permiten ajustar dosis de fertilización por ambiente, planificar rotaciones, seleccionar variedades y evaluar la rentabilidad por ambiente. Además, la trazabilidad de la información fortalece la certificación de buenas prácticas y la posibilidad de acceder a mercados que valoran la transparencia productiva.


La cosecha de trigo puede ser más que la recolección de un cultivo: con protocolos y herramientas adecuadas, cada archivo descargado se transforma en información útil para mejorar la gestión y la sustentabilidad productiva.

Fuente: La Voz — Trigo y digitalización del agro