Vasectomías: por qué crecieron las consultas y qué técnicas se usan hoy

Un salto en la Provincia de Buenos Aires y un fenómeno que se replica
En la provincia de Buenos Aires, las vasectomías pasaron de 113 en 2020 a 1.774 en 2024 según el Ministerio de Salud bonaerense, un aumento de 15 veces en cuatro años. Ese crecimiento en consultas y procedimientos refleja, según expertos, cambios en la demanda de métodos de planificación familiar y en la oferta de servicios médicos. El fenómeno no se limita a la provincia: profesionales de otras jurisdicciones registran mayor interés por la intervención.
Qué es la vasectomía y por qué crece su demanda
La vasectomía es un procedimiento quirúrgico ambulatorio destinado a la anticoncepción definitiva en varones. Consiste en interrumpir el paso de los espermatozoides a través de los conductos deferentes para evitar la fecundación. Es rápida —generalmente dura menos de 30 minutos— y se practica con anestesia local. No es un método inmediato: se requiere un control posterior con estudio seminal para confirmar la ausencia de espermatozoides.
Expertos consultados por medios nacionales y funcionarios sanitarios coinciden en que la mayor demanda responde a varias causas que suelen mencionarse juntas: mayor conciencia sobre la corresponsabilidad en la planificación familiar, búsqueda de alternativas a métodos hormonales o intrauterinos por parte de las parejas, y una oferta creciente de turnos en el sector público y privado. También influyen factores sociales, como cambios en los roles parentales y decisiones de parejas que optan por no tener más hijos o por opciones de vida sin hijos.
Técnicas más utilizadas hoy
Las técnicas varían según el centro y la experiencia del equipo. Entre las más comunes están:
- Vasectomía convencional con bisturí: se hace una pequeña incisión en el escroto para exponer y seccionar los conductos deferentes.
- Vasectomía sin bisturí (no‑scalpel): se usan pinzas especiales para localizar y exteriorizar el deferente con una punción mínima; reduce sangrado y tiempo de recuperación.
- Electrocauterio o cauterización térmica: consiste en cauterizar un segmento del conducto para asegurar su cierre.
- Interposición fascial: tras cortar el conducto, se coloca tejido entre los extremos para reducir la probabilidad de recanalización.
- Clip o clip vascular: en algunos casos se colocan clips que comprimen el conducto; su uso depende del criterio del equipo.
En la práctica contemporánea muchos equipos combinan más de una técnica (por ejemplo, sección más cauterización y/o interposición) para aumentar la efectividad.
Riesgos, efectividad y pasos posteriores
La vasectomía es uno de los métodos más efectivos de anticoncepción: las tasas de fracaso son bajas cuando se realiza correctamente. Como todo procedimiento tiene riesgos: infección local, hematoma, dolor transitorio y, raramente, recanalización del conducto que puede llevar a embarazo. La reversibilidad existe mediante técnicas de microcirugía, pero sus resultados no están garantizados y son más costosos y complejos que el procedimiento inicial.
Tras la intervención se recomienda reposo relativo 48 a 72 horas, evitar actividad física intensa y relaciones sexuales por el tiempo que indique el equipo. Es imprescindible realizar el control seminal posterior para confirmar la azoospermia (ausencia de espermatozoides) antes de considerar la anticoncepción como efectiva.
Acceso y equidad: lo que dicen los especialistas
Los datos oficiales bonaerenses muestran una expansión de procedimientos en los últimos años; especialistas señalan que la accesibilidad en hospitales públicos y el aumento de prestaciones privadas ayudan a atender la demanda. Aun así, la oferta sigue siendo desigual en distintas regiones del país y el acceso depende de la articulación entre niveles de atención, la formación de personal y la información que reciban las parejas.
Los equipos de salud recomiendan brindar información equilibrada sobre ventajas, límites y alternativas. La decisión debe ser informada y voluntaria: antes de operarse, es aconsejable recibir asesoramiento sobre métodos reversibles y no reversibles, y sobre el proceso posoperatorio.
Qué preguntarle al profesional antes de decidir
- Qué técnica propone y por qué.
- Riesgos y complicaciones posibles.
- Recomendaciones posoperatorias y tiempos de recuperación.
- Cuándo y cómo se realiza el control seminal.
- Alternativas anticonceptivas y opciones de reversión si correspondiera.
Para profundizar o solicitar turnos, es recomendable consultar la red de atención local o el Ministerio de Salud de la provincia correspondiente. En la provincia de Buenos Aires los datos oficiales citados corresponden al Ministerio de Salud bonaerense.
Fuente: Infobae
